lunes, 20 de octubre de 2008

EL DSICURSO DEL AMO-r



EL DISCURSO DEL AMO-rLa práctica psicoanalítica confrontada con la lógica de mercados

INTRODUCCIÓN


Quisiera hablarles sobre los interrogantes de los cuales en los últimos tiempos estoy pensando y trabajando acerca de las características actuales del lazo social y lo que pienso como pregunta e hipótesis, sobre la regulación casi exclusiva de los lazos sociales por la lógica de mercados, y de que modo esto es posible articularlo con la lógica de los cuatro discursos de lacan, y su versión del discurso el AMO, transformado en el discurso capitalista, es decir, sin llegar a ser un quinto discurso, sino mas bien, ejerciendo una torsión sobre la escritura del discurso del AMO, se puede pensar hoy eso que Lacan llamó el discurso capitalista, para eso, debo hacer un breve rodeo por las dos lógicas mencionadas, la lógica de mercado en la cuál tomo como referencia su los desarrollos de Michel Foucault, en el curso “El Nacimiento de la Biopolítica,” (1)y los desarrollos de lacan sobre los cuatro discursos. El título de este trabajo, esta referido a la implicación dentro de la lógica del discurso capitalista de la exclusión de la castración, tomando como referencia al amor, de allí esa escritura, y el subtítulo del mismo es mas preciso ya que creo no hablo de otra cosa que de la práctica psicoanalítica confrontada a la lógica de mercados.

Lógica de mercado

Con estos ejemplos quiero significar que en la trama social, los lazos están regulados casi exclusivamente por la lógica de mercado. Se hace necesario aclarar aquí, en que sentido se toma al concepto de mercado, solo en un sentido grosero, o llano, para mencionarlo de algún modo, podría ser, todo tipo de operación que tenga como finalidad la mayor rentabilidad, en el menor tiempo posible, con la menor inversión y sin importar que clase de costos se deba pagar en el tejido social, y con el menor costo posible, es decir, pura rentabilidad, con el menor riesgo. Es interesante señalar esta característica del mercado actual, propio de las políticas neoliberales aplicadas en los países del tercer mundo. Como se torció, se transformó en cierto sentido la concepción misma de “mercado” en el terreno de la economía en su relación con las políticas de estado, si se tiene en cuenta el modo de surgimiento como lo señaló Foucault en su curso “ El Nacimiento de la Biopolítica”; decía: “…Acerca del mercado en el sentido muy general del término, tal como funcionó en el medioevo y en los siglos XVI y XVII, era esencialmente un lugar de justicia…era un lugar de justicia en varios sentidos. Ante todo era un lugar revestido extremadamente proliferante y estricta: reglamentación en cuanto a los objetos que debían llevarse a los mercados, el tipo de fabricación de esos objetos, el origen de los productos, a los derechos que había que pagar, a los procedimientos mismos de venta, a los precios fijados.” (2).
Es decir el mercado nace como un lugar de reglamentación y lo que es mas importante señalar también como un lugar de justicia, de justicia distributiva, “…a tal punto que el mercado debía ser un ámbito privilegiado de la justicia distributiva, porque al menos para una serie de productos básicos como los productos alimenticios, mediante las reglas del mercado se disponía que, si no los mas pobres, por lo menos algunos de los mas pobres pudieran comprar cosas al igual que los mas ricos,(3)
En ese sentido el mercado es un lugar de justicia distributiva, en esa época. Pero lo más interesante que considero para este trabajo al menos, es el señalamiento que Foucault realiza ene este aspecto con respecto a la pregunta que se hace al respecto, se pregunta, ¿cuál era el sentido de esas regulaciones? Para conseguir la verdad de los precios, como estamos acostumbrados a escuchar hoy? No en absoluto!, dice Foucault, era para garantizar la ausencia de fraude. La protección del comprador, la ausencia de robos, de delitos. Y es interesante advertir la noción de riesgo que se corría por los dos lados, por el lado del comprador y por el lado del vendedor. Era menester entonces la protección del fraude en cuanto a los objetos del mercado y había que garantizar su calidad.

La característica que señalo aquí de la lógica de mercados comunes en la actualidad, si bien conserva gran parte de esas características de su origen, hoy, no tenemos esa percepción de justicia distributiva precisamente, y muchos menos cuando pensamos en la calidad de ciertos objetos de consumo, sobre todo los alimenticios, en donde, al priorizar esta lógica de pura rentabilidad a cualquier costo, muchas veces uno de esos costos, es la calidad, porque hoy calidad, significa, inversión, riesgo, tiempo etc, variables que en este tipo de lógicas se tratan de excluir.
Pero me interesa de sobremanera para este trabajo, destacar dos características de esta sociedad de empresa que Foucault trabaja en el curso mencionado, la clase del 21 de marzo 1979, y son en primer término:
1) la generalización de la forma económica del mercado, mas allá de los intercambios monetarios, es decir, el análisis en los términos de oferta y demanda, servirá desquema para abordar ámbitos no económicos y
2) es como la grilla neoliberal de estos -ordoliberales-, podrá y deberá permitir “testear” la acción gubernamental, juzgar su validez, permitir objetar en la actividad del poder público sus abusos, sus excesos, sus inutilidades, la prodigalidad de sus gastos. Se trata de finalmente, de filtrar toda la acción del poder público en el campo del mercado. Esto es una crítica no jurídica ni política solamente, es una crítica mercantil opuesta a la acción del poder público. Dice Foucault, un tribunal económico permanente frente al gobierno.
Mientras el siglo XIX había buscado establecer, frente a la acción gubernamental y contra su desmesura, una especie de jurisdicción administrativa que permita juzgar la acción del poder público en términos de derecho, ahora tenemos una especie de tribunal económico que pretende juzgar la acción del gobierno desde el punto de vista estricto de la economía y el mercado.
Lógica de los cuatro discursos





Discurso significa en la elaboración lacaniana, “lo que determina, una forma de vínculo social” (4) es decir, solo es una forma de vínculo social, es lo que hace vínculo. También hay que entender que, discurso, entendido de este modo, es, o puede ser, un discurso sin palabras, es una posición subjetiva y no una manera de hablar de un individuo en particular. Es una cuestión de estructura de discursos, una estructura que excede por mucho a la palabra, decía Lacan.
En Lacan, lo colectivo, no es simplemente la masa, es por este y otros motivos, que incluye en los cuatro términos de este artefacto al objeto a, verdadera invención lacanianas. Es decir, incluye la falta. El resto de los términos son; S1, S (barrado), S2.
También cuando Lacan habla de discurso, habla de topología, de cuadrípodo o tetrápodo
En el seminario XIX, o XIX bis, denominado el saber del psicoanalista, plantea, que el lazo social actual, hay forclusión de la castración, y dice, no porque pase en un sujeto, no pasa a nivel social, también pasa, y es lo que pasa ahora, y es lo que impide el amor.
Para poder mínimamente o salvajemente hablar de los cuatro discursos, es necesario saber ahora, esto; que la escritura S1, significa, significante AMO, que interviene sobre este otro término, S2, la batería de los significantes, el todo saber, representando al sujeto en relación a esa batería, la relación entre estos dos significantes hace aparecer el S barrado, como dividido, y en esa operación finalmente algo que se inscribe como pérdida; el objeto a, lo real, lo imposible que se inscribe como pérdida, como resto.
Anteriormente dijimos que Lacan se refiere al discurso como una topología, todo discurso se sostiene a partir de cierto lugar, que se designará como agente, esta ubicado arriba a la izquierda, también llamado lugar de la apariencia, el de la derecha, arriba, el lugar del otro, también llamado el lugar del trabajo de goce, abajo a la derecha, se encuentra el lugar del producto o plus de gozar y el de abajo a la izquierda es el de la verdad.
Cada una de estas letras tomará un valor y una función distinta dependiendo del lugar en que se encuentre, después tenemos un movimiento de rotación que hará que cada discurso tenga un reverso, es decir, cada discurso tiene su propio reverso como el discurso del analista es el reverso del discurso del Amo, entonces haciéndolos girar se obtienen 4 discursos, no más. Ya veremos que pasa con aquel discurso que nos interesa aquí, que es el que Lacan llamó el discurso capitalista. Que surge a través de una pequeña modificación del discurso del Amo. Para detenernos allí, también se hace necesario que señalemos la importancia de esas dos líneas que aparecen abajo señalando que el producto no está conectado con el lugar de la verdad. Esta separado, hay algo que impide que se junten.
También hay que destacar, aunque sea someramente, la vectorización, el sentido de circulación de los lugares, esto hace a la divergencia, central para comprender el movimiento de rotación y la torsión que hará Lacan sobre el discurso del Amo para producir el discurso capitalista.
La vectorización tiene una propiedad, que es la siguiente, nunca confluyen las tres flechas al mismo lugar, en el discurso capitalista, se altera esta vectorización, además claro de alterar el lugar de dos letras, la característica del discurso capitalista en la vectorización es que, a cada vértice llega una flecha y parte otra. Entonces la propiedad del vértice de la verdad, es la divergencia, de modo que diverge hacia el lugar de goce y hacia el lugar de la apariencia, propiedad que nombra la NO RELACIÓN SEXUAL.
Vamos a citar al tipo que más trabajó este asunto en detalle, el psicoanalista Jorge Aleman, sobre este pequeño cambio de letras dice: “…en primer lugar se trata de un rechazo de la verdad del discurso, se ha invertido el sentido del vector que conecta el lugar de la verdad con el lugar del semblante, el agente repudia la determinación que recibe de la verdad para pasar a dirigirla. El sujeto entronizado como agente, opera sobre el significante colocado en el lugar de la verdad. Se observa como justamente, es el rechazo de la castración, lo que constituye al discurso capitalista en una circularidad. A su vez, es este carácter circular, el que incluso abre la cuestión sobre hasta que punto se puede denominar discurso a un movimiento circular en donde, al haber rechazo de la castración, no hay barrera alguna respecto al goce…”(5)
Ahora leemos a Lacan en el radiofonía y televisión: “…la plusvalía es la causa del deseo, en la cuál una economía hace su principio..” y que “…el discurso capitalista se caracteriza por ser un movimiento circular en donde la apropiación del plus de gozar no está obstaculizada por barrera alguna…” (6)
Y en el saber el psicoanalista dice: “… lo que distingue al discurso capitalista es esto: la verwerfung, el rechazo, el rechazo fuera de todo el campo de los simbólico, con lo que ya dije que tiene como consecuencia. El rechazo de que? De la castración. Todo orden. Todo discurso que se entronca en el capitalismo, deja de lado lo que llamaremos simplemente las cosas del amor, amigos míos, ven eso eh? No es poca cosa! (7)
Que relación existe entre los efectos de este discurso dominante y el predominio de la unión de la ciencia y la técnica, o más precisamente el cientificismo, y la técnica, (recuerdo la frase de un ex-amigo que decía la proliferación estratosférica de la producción de objetos a).
Lacan denominó a lo largo de su enseñanza, a la producción de estos objetos de la ciencia y la técnica de distintos modos, hasta el seminario 6, los define vinculados al fetiche de la mercancía en relación al falo, luego en el seminario XVII, elabora el concepto de letosas en relación al objeto a. y en la tercera y el seminario XX: los Gadget en relación al síntoma. Mas allá de las distintas elaboraciones a lo largo de la enseñanza de Lacan, quiero señalizar, que se esta refiriendo a esos objetos fascinates producto de la ciencia y la tecnología que regulados por la lógica de mercados intentan taponar la falta, la castración, una de las características centrales de estos objetos son la capacidad de recuperación de goce, son objetos universalizables, que representan la homogenización de los modos de gozar. Para el psicoanalista Patricio Álvarez sostiene la hipótesis de que “…si es posible para los ideólogos del capitalismo hablar del fin de las ideologías, es porque a diferencia del Amo antiguo, el capitalismo no necesita sostenerse en ideales, dado que se sostiene de algo que tiene mucho mas poder: el discurso capitalista se sostiene de la recuperación de un goce para todos, de un goce globalizado, a través de estos consumos.” ( salidas del discurso capitalista. (trabajo publicado en el sigma. )
En la tercera Lacan, llega a decir que el porvenir del psicoanálisis, es algo que depende de lo que advendrá, de ese real, a saber, depende de que los Gadget verdaderamente te nos impongan, de que lleguemos nosotros mismos a estar animados por los Gadget, debo decir, dice Lacan, que esto me parece poco probable
La falta de límite que la castración inscribe nos abre a un escenario del “todo es posible” . se trata entonces de la promoción de goce, con ausencia de una ley que haga límite.
Es decir hay aquí una conexión necesaria entre capitalismo y tecnociencia. La plusvalía permite la producción extensiva e ilimitada de objetos al servicio de la satisfacción pulsional. Proliferan así las maneras actuales del autoerotismo y la narcotización, espacio de goce que puede muy bien subsistir sin recurso al otro. El objeto colma la división subjetiva. La compulsión consumista que se generan con estos objetos, me hace recordar a la figura del coleccionista al revés, mencionada por Beatriz Sarlo(*), este coleccionista al revés funcionaría del siguiente modo: El antiguo coleccionista adquiría un objeto de cierto valor para él, para su goce, y éste cobraba valor con el paso del tiempo, el valor aumenta con el tiempo, el coleccionista de actos de consumo de nuestros días, colecciona actos de consumo, es decir, el objeto empieza a perder valor, al momento mismo de su adquisición, porque ya esta desvalorizado por otro que el mercado ofrece y que lo reemplaza, generando la necesidad en el consumidor.








Efectos en la subjetividad actual.
Tengo el atrevimiento de mencionar algunas cuestiones referidas a los efectos en la subjetividad actual y que determinan nuevas formas de presentación clínicas (así se las denomina en el campo PSI).
Resulta que en la lógica de mercados, nada del intercambio escapa a esta lógica, y como no solo consumimos objetos producto de la ciencia y la tecnología, sino a demás consumimos imágenes identificadoras de felicidad.
Esta característica del lazo social tiene como uno de sus efectos ordenadores, -que los autores, Miguel Benasayag y Edith Charlton (8) nombran, en ese excelente trabajo denominado, Crítica de la felicidad; - un imperativo categórico, de “ser Felices”, Ser Feliz” en la vida contemporánea funciona cono imperativo categórico, donde la sociedad mercantil llena el vacío de la noción de felicidad por medio de imágenes identificatorias de la felicidad. Para paliar la angustia la sociedad propone este tipo de imágenes, verdaderos espejismos. La sociedad mercantil no puede impedir que la gente desee, pero aliena sus desvelos y sus deseos dirigiéndolos hacia el provecho comercial. Es allí de este modo donde las ideas del amor, no son ajenas a esta lógica.
La sociedad de la mercancía y el espectáculo, ha hecho del amor, una súper mercancía. Voy a leer un breve extracto, del librito recién citado, y que de algún modo, resume, grafica, este intento de articular de que modo, en el discurso único dominante de nuestro tiempo, el amor esta articulado como un ideal de amor.
Sobre una frase célebre de un grupo de feministas a manera de slogan dice: “ una mujer sin un hombre es como un pez sin bicicleta”. los autores sostienen tomando como referencia a la teoría del amor, (si es que eso es posible en la enseñanza de Lacan, o mas precisamente a lo que la práctica analítica puede producir como efecto sobre el amor es decir, una idea del amor no armónico , pastoral) una idea del amor que incluya la castración, la falta, que el discurso capitalista forcluye, entonces cito: “…no se trata de un enchufe eléctrico, ni de una sabiduría cualquiera de la naturaleza, que determina una línea unívoca y sin ruptura de género, …el amor tiene mas que ver con un pez muy original al que le gusta una bicicleta, y con una bicicleta que sueña con vivir con un pez. Ni armonía, ni encaje, ni correspondencia, simplemente tal vez admiración.” (9)


Conclusiones
Entonces, porque el discurso del AMO-r escrito de ese modo, escrito atrevidamente de ese modo, desde ya que eso no tiene nada de riguroso, es solo un modo de graficar con una escritura posible, que si el discurso capitalista, es una variante del discurso del AMO, pero con la diferencia central que éste, (el capitalista) excluye la castración, es decir la posibilidad del amor, en tanto el amor pone en juego a la castración. Entonces si hay exclusión de la castración, no puede ponerse en juego el amor, así lo menciona Lacan, en el saber del psicoanalista, dice que para que puede ocurrir algo interesante entre el hombre y la mujer ( no detenerse en la cuentón de género sino en las posiciones subjetivas) tiene que estar en juego la castración. Al poner esa pequeña letra hago referencia a la posibilidad que existe en el discurso del amo que incluye en su seno al amor es decir a la castración.
Esta invención freudiana, esta destinada a desaparecer, desde sus orígenes, siempre estuvo cuestionada, y en estos tiempos, tiene toda su lógica la crítica despiadada de los mercaderes del sentido. Como es una práctica que permanece en la cultura, sin intervención del estado, (es decir, hoy podemos decir, del mercado) es una práctica que no puede ser regulada en ese sentido, no se sabe que pasa allí. En ésta lógica de mercado, la práctica analítica es una práctica de inutilidad, costosa, que necesita su tiempo, para que algo de la verdad del sujeto aparezca. Práctica de inutilidad en el sentido mercantil. Alguien paga para hablar de él mismo, en donde no se lleva nada a cambio, salvo sus palabras, será poca cosa eso?
Antes había dicho al pasar que por este motivo el discurso capitalista no es rigurosamente un discurso en la formalidad de la construcción lacaniana de los cuatro discursos, porque contradice la lógica de los otros cuatro discursos, el discurso capitalista es un discurso circular que se cierra en si mismo y no permite la circularidad de los mismos. Los cuatros discursos permiten una modalidad que favorece el paso de un discurso a otro, por eso existe la posibilidad por ejemplo en el trabajo analítico de cambios de posiciones. Es obvio que por ejemplo una de las tarea de la posición analítica es conmover al sujeto alojado en esa posición, para poder al menos preliminarmente poner al inconsciente allí donde ha sido rechazado!. Entonces porque la práctica analítica confrontada con la lógica de mercados, porque la práctica psicoanalítica sigue siendo y hoy, aún más, una práctica subversiva, que mina el discurso del amo, que está allí como un apéndice, o en su reverso, que empuja a amar lo inconsciente, la falta, en un mundo donde cada vez mas se perfila a taponar la falta en el ser, a través de los efectos de la ciencia y la técnica y su ideología extrema es decir el cientificismo. Anudado o soportado casi exclusivamente en la lógica de mercados comunes globalizados; pero a no confundirse con hacer de este planteo otra religión (al decir de jean Allouch: una religiosidad mas obscena, en la medida que está privada de teología), o una ciencia, el psicoanálisis no esta allí, porque tanto la fe religiosa, las filosofía, y la ciencia se ocupan del Todo, un científico es un creyente, la lógica de la ciencia es como la de la religión, se ocupa del todo, porque de lo que no puede responder responde ya se sabrá! Acaso, el mayor experimento científico de la humanidad, no se llama La máquina de dios? Sobran ejemplos actuales de eso. El psicoanálisis trabaja con el sujeto de la ciencia, surge con el advenimiento de la ciencia, porque se ocupa de aquello que la ciencia excluye, es decir el sujeto! La subjetividad.
La psicoanalista Alicia Alvarez,(10) que trabajó específicamente este tema, en profundidad y con otra rigurosidad que ésta. Sostiene que la parcialidad de los cuatro discursos como modo novedoso en Lacan, muestra la necesaria incompletud del saber, que no se trata de las clásicas divisiones disciplinares sostenidas en el límite de lo visible para campo del saber, en tanto lo real, no se muestra dócil a su aprehensión por ningún saber. Ahora parafraseando a Lacan, digo que el advenimiento de ese real no depende para nada del analista. Su misión (la nuestra)es hacerle la contra. Al fin y al cabo, lo real puede muy bien desbocarse, sobre todo desde que tiene el apoyo del discurso científico! (11)

Ribo. octubre 2008


Referencias bibliográficas
(1) Michel Foucalt. El nacimiento de la Biopolítica. Ed Fondo Cultura Eco.
(2) Michel Foucault. Ob. Cit. Pag 276
(3)Michel Foucault. Ob. Cit. Pag 277
(4) Jacques Lacan. Seminario XX . Ed Paidós. pag. 94
(5)Aleman cuestiones antifilosóficas en Jacques lacan, el discurso capitalista, atuel, pag 20)
(6) Jacques Lacan. Radiofonía y televisión.
(7)Jacques Lacan. SeminarioXIX, El saber del Psicoanalista. clase enero 72 pag 61. Inédito-
(8) Miguel Benasayag. E. Charlton. Crítica de la Felicidad. Ed Nueva Visión.
(9) Miguel Benasayag. E. Charlton. Ob.Cit. Pag. 100
(10) Alicia Álvarez. La Teoría de los Discursos en Jaques Lacan. Ed. Letra Viva.
(11) Jacques Lacan, la tercera, Intervenciones y textos. Ed manantial. Pag 87














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